2x cucharadas colmadas de harina
3x cucharadas de aceite
Sal
Elaboración:
Poner el aceite en una sartén a fuego no muy fuerte. Cuando el aceite esté caliente añadir la harina y remover bien hasta conseguir una pasta amarillenta. Dejar freír un poco para evitar que la salsa tenga gusto a harina. Añadir la leche deprisa para parar la ebullición removiendo rápidamente para que se mezcle la harina con la leche sin formar grumos. No parar de remover a fuego suave hasta que rompa a hervir de nuevo, añadir sal al gusto. Dejar reposar unos instantes hasta que coja la textura deseada. Para variar la salsa y obtenerla más o menos espesa, modificar la cantidad de leche.
Si no espesa lo deseado, disolver en un poco de leche (menos de media taza) una cucharadita de harina de maíz (maizena), y añadírselo a la bechamel.
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