200 gr. mantequilla
200 gr. azúcar glass
2 o 3 cucharadas soperas de crema de chocolate
Elaboración:
Hacer buttercream es muy fácil, lo único que necesitáis es una batidora eléctrica, mantequilla y azúcar glass (a ser posible del de compra, ya que se integrará mejor) y algo que le dé aroma: chocolate, mermelada, aromas...
La mantequilla debe ser sin sal y la debéis sacar un rato antes de la nevera para que esté blandita (pero no desecha, así que no sirve ponerla en el microondas).
Ponemos la mantequilla troceada junto con el azúcar glass tamizado en un bol y batimos (con ayuda de una batidora eléctrica) durante unos 5 minutos (unos 10 si lo hacéis con la batidora típica de varillas eléctrica). Cuanto más lo batáis, más integrado quedará el azúcar y más blanco quedará el buttercream (por si lo necesitáis blanco para alguna tarta). Debéis empezar a batir siempre en velocidad baja (para no llenar toda la cocina de polvo de azúcar glass) y una vez se haya integrado el azúcar trabajaremos a máxima potencia.
Pasados los 5-10 minutos, ya tenemos un buttercream listo, al que solo le hace falta añadir un aroma. En este caso, vamos a añadir crema de chocolate (ya sea nocilla, nutella o marcas blancas de los supermercados). Empezamos con 2 cucharadas soperas bien colmadas y seguimos batiendo hasta que quede integrada. Probamos y si queremos que tenga más sabor a crema de chocolate añadimos un poco más y volvemos a batir (procederemos así hasta que esté a nuestro gusto).
El buttercream nos servirá para decorar tartas, cupcakes, para ponerlo en las tostadas del desayuno, como relleno de macarons... Se puede guardar durante unas 2 o 3 semanas en la nevera y evidentemente lo podéis congelar.